La cistitis post-coital es un tipo de infección urinaria que se caracteriza porque aparece con cierta frecuencia en las mujeres tras las relaciones sexuales.
¿Por qué se produce?
En la mayoría de los casos, esta cistitis se produce por la transmisión de bacterias intestinales de la propia mujer debido al roce de los cuerpos propio del coito.
La bacteria E. coli, responsable de hasta el 80% de las infecciones de orina, se encuentra normalmente en el aparato digestivo que tiene su final en el ano. En las mujeres, la zona anal y la vaginal están tan próximas que es más fácil que se produzca la transmisión de una zona a otra. El roce de los cuerpos propio del coito puede favorecer que la E. coli se desplace y ascienda fácilmente a la vejiga, donde es capaz de adherirse y causar la infección.
Sin embargo, en algunos casos menos frecuentes, puede ser el hombre el que contagia a la mujer. Por lo que es conveniente consultar con el médico.
Síntomas de la cistitis
Algunos de los síntomas más característicos de la cistitis son el escozor, la necesidad frecuente de ir al baño, dolor al orinar o dolor en la zona pélvica. También puede llegar a producir fiebre o escalofríos, por lo que sería conveniente acudir al médico.
Estos síntomas pueden confundirse a veces con una simple irritación debida a la relación sexual, que puede cursar con escozor y malestar al orinar.
¿Cómo podemos prevenirlo?
Sigue estos 3 sencillos consejos, tanto si ya te ha ocurrido esto alguna vez como si no te ha pasado nunca, que prevenir no cuesta nada.
Las infecciones urinarias no suelen ser muy graves pero son muy molestas y pueden derivar en infecciones más importantes, por lo que lo mejor es consultar al médico siempre que sea posible.
Si la infección es más bien leve, o por el momento no tenemos opción de ir al médico, hay algún truquillo que podemos hacer para que pase mejor.
¿Por qué se produce?
En la mayoría de los casos, esta cistitis se produce por la transmisión de bacterias intestinales de la propia mujer debido al roce de los cuerpos propio del coito.
La bacteria E. coli, responsable de hasta el 80% de las infecciones de orina, se encuentra normalmente en el aparato digestivo que tiene su final en el ano. En las mujeres, la zona anal y la vaginal están tan próximas que es más fácil que se produzca la transmisión de una zona a otra. El roce de los cuerpos propio del coito puede favorecer que la E. coli se desplace y ascienda fácilmente a la vejiga, donde es capaz de adherirse y causar la infección.
Sin embargo, en algunos casos menos frecuentes, puede ser el hombre el que contagia a la mujer. Por lo que es conveniente consultar con el médico.
Síntomas de la cistitis
Estos síntomas pueden confundirse a veces con una simple irritación debida a la relación sexual, que puede cursar con escozor y malestar al orinar.
¿Cómo podemos prevenirlo?
Sigue estos 3 sencillos consejos, tanto si ya te ha ocurrido esto alguna vez como si no te ha pasado nunca, que prevenir no cuesta nada.
- Procura mantener siempre una correcta higiene en la zona genital. Cuando vayas al baño, límpiate siempre de delante hacia atrás para evitar el arrastre de gérmenes.
- Orina siempre tras mantener relaciones sexuales; ayuda a eliminar los gérmenes que hayan podido llegar a la vía uretral durante el coito.
- Toma suplementos a base de arándano rojo. Ayudan a evitar la adhesión de las bacterias a las paredes de la vejiga, por lo que ayudan a prevenir la infección y sus recaídas.
¿Qué hacer cuando tenemos cistitis?
Las infecciones urinarias no suelen ser muy graves pero son muy molestas y pueden derivar en infecciones más importantes, por lo que lo mejor es consultar al médico siempre que sea posible.
Si la infección es más bien leve, o por el momento no tenemos opción de ir al médico, hay algún truquillo que podemos hacer para que pase mejor.
- Beber mucho agua; aunque nos duela orinar, cuanto más líquido pase por los conductos urinarios, mejor se irán limpiando.
- Tomar un suplemento en vitamina C, que acidifica la orina y ayuda a eliminar las bacterias.
- Aplicar calor en la zona; por ejemplo con una bolsa de hierbas o de agua caliente.
- También puedes tomar algún suplemento de arándano rojo, como los anteriores, pero en dosis preparadas para tratamiento en lugar de para prevención. Por ejemplo, el Cistitus Forte, es un tratamiento de 10 días que contiene, además del arándano rojo, vitamina C y salvia, que es un desinfectante natural.
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